Estoy agotada

mudarse en el ciberespacio es una cruz, pero hacerlo en la vida real… diosssssssss! Cómo he podido acumular tanta mierda en 11 años de autónoma?? He dedicado 3 días sólo a tirar… el resto del tiempo, a hacer cajas con un cierto criterio, de manera a poder trabajar asap en casa.
El problema es que en casa no trabajo… me he apuntado a un club de tenis/gimnasio; voy en bici por la mañana; miro a mi alrededor y oigo voces… me susurran…. “aaaabreeeemeeeee, ordeeeeeenammmmmeeeee” y claro, me pongo a ordenar cajas. He mencionado que tengo la casa llena de cajas? ;)
Pero, el fin está cerca. Creo que para el lunes ya estará todo aquí y ya podré volverme loca recolocando la casa entera, mientras con el pie derecho escribo un artículo sobre antenas para barcos y con el izquierdo convoco la rueda de prensa :D
Y el Jueves me bajo a AGP, a pasar unos días con mi nueva familia reconstituida y surrealista. Iremos de cumpleaños infantil, alguna excursionsita, mucho rebujito (porfisssssssssss!) y un poco de cambio de aires. Lo necesito. Lo necesitamos.

Y me voy a la cama que me caigo de sueeeeeeeeeño!

Cajas y más cajas

Mi vida laboral está metida en cajas. De todos los tamaños, pesadas y ligeras. Llenas de cosas útiles o completamente futiles, pero que desde hace muchos años me acompañan y de las que no me quiero desprender.
Todavía no tengo destino, no sé si trabajaré desde casa o regresaré algún día aquí, donde me sentía tan y tan a gusto…Mi espacio se va a llenar de gente procesando datos de coches… ¡¡¡me da tanta pena!!! Mais, c’est la vie.
Este cambio ha puesto en marcha un proceso que dormía escondido desde hace años y que hace mucho daño a la familia. Sucesión, herencia, espacio de cada uno de los miembros, todo parece haber estallado dejando a la más importante herida de consideración. Las quemaduras de los demás no me preocupan, sanaran con el tiempo, como siempre. Las mías, las más leves. ¿Será que tengo el pellejo más duro?
Y mientras tanto, el sueño de empezar una nueva vida junto a S. en el sur se desvanece. El último enfrentamiento ha sido demasiado duro para poder olvidarlo, tengo una sensación de vacío difícil de explicar…
No tengo tiempo de pensar en ello, ¡he de seguir haciendo cajas!

Cuanto polvo!

Una se va unas cuantas semanas y regresa encontrándose la casa llena de polvo…

Dejad que me ate un pañuelo a la cabeza, saque el mocho, y cual una Carmen Maura Almodovariana, deje esto como los chorros del oro antes de empezar a contaros cositas…Y es que vuelvo a estar llena, y como no es plan de ir vomitándolas por ahí, mejor aquí, que queda todo más “íntimo”…

¡Hasta dentro de un ratito!