Amor… no, amor propio

Siempre he tenido tendencia a que me duela más. Bastante más…

Me duele el amor propio cuando mi pareja no me respeta como persona. Me duele cuando se recrea exhibiendo su nueva conquista en mi entorno. Cuando lanza mensajes en foros que sabe que yo frecuento. Cuando le pide que haga lo mismo que me pidió a mi hace unos años.. años ya? madre mía, pero como he podido aguantar tanto.

Lo bueno de que te duela el amor propio es que te recuerda que lo tienes. Algunas personas hace tiempo que se lo dejaron olvidado entre las páginas de un libro, probablemente de matemáticas…

Mi amor propio tiene una salud de hierro :) Resiste los embites traicioneros, se rebela ante la falta de respeto hacia sustitutas desteñidas, se crece cuando recibe los agradecimientos y las caricias de quien ha sabido valorarme.

Mi amor propio y yo nos llevamos de puta madre. Compartimos colchón hace mucho tiempo… nos conocemos, nos entendemos, nos respetamos y nos queremos.

Y ahora, cuando mi vista me ofende, me da una palmadita en la espalda y me dice “anda gata, tira… que de la que te has librao”….

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